Tres veces qué hacés

Le doy vueltas al pasado
Porque el futuro es una masa amorfa gris
Pesada y silenciosa
El famoso "elefante en la habitación"
Pero sin contorno ni instinto.
Una por una repaso las escenas
Como en una proyección recortada
Lo claro se siente más claro
Y lo oscuro es oscuro siempre.
El traje de archienemigo me queda largo
Cuando logro abrir los ojos y apartar el asco
Soy una caricatura de mí misma
Pidiendo que le dejen entrar
Llorando por los vidrios rotos
Soplando la rodilla lastimada.
Mí poesía no es poesía no es nada
Más que un constante intento de harakiri
Muy a tono con mí orgullo remilgado
A veces la daga es dulce, se siente como un beso
A veces la sangre es antigua, negra brillante.
Pegué por la casa unos cartelitos
Que intentan recordarme que con existir es suficiente
Por suerte aún queda amor
Un par de brazos que me sacan del mar
Cuando estoy ahogándome.
¿Y yo? Bien gracias
Tomo de a sorbitos el hastío
Para embriagarme mejor.